Película japonesa del director Takeshi Kitano
La famosa obra cinematográfica de Takeshi Kitano, Dolls (Dooruzu, Muñecas), se estrenó en el año 2002, es considerada como la obra maestra del polifacético director japonés, una propuesta diferente ya que se aleja de la violencia que caracterizaba la carrera de Kitano. Dolls, es percibida desde la mirada de la tradición japonesa, reflejada en los mendigos atados, pasando por temas como el amor y el destino, como también de las decisiones que marcan la vida de una persona para siempre. Hoy, quiero retomar la obra cinematográfica resaltando 4 aspectos principales como el amor, la tragedia, el sufrimiento y las ataduras.
En este orden de ideas el amor es el elemento que une las historias contadas en Dolls y está representado en diferentes formas narrativas cuya transversalidad, deja reflejado algunos aspectos importantes de la cultura japonesa. El amor también esta denotado en las ataduras, y en cierta forma es evidente en las historias que se cuentan en Dolls, pues aunque es más explícito en los mendigos atados, también se puede inferir del anciano y el antiguo amor que lo esperaba cada sábado en el parque y en la joven cantante, que al final cuando el fanático no podía aceptar que ella se alejara del mundo del éxito y se exiliara, éste la buscó hasta encontrarla. Estos son apenas algunos reflejos de lo que llamamos ataduras y que se relacionan con el amor.
Los otros dos elementos fundamentales en esta cinta son; la tragedia, que es trasversal en las historias de amor que se cuentan en Dolls, y algo que es muy triste, porque se percibe al final de cada historia romántica es que el protagonista siempre es la tragedia. Y finalmente el sufrimiento, es un elemento característico en esta obra, porque se percibe en cada uno de los personajes descritos en esta cinta cinematográfica, deja como enseñanza que cuando uno no encuentra la realización en temas de amor, difícilmente encuentra la felicidad.
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